Su tío lo impulsó a buscar nuevos horizontes, pero para ello debía sacrificar a su familia. Hace más de un año Esmelly Small dejó su natal Venezuela e inició su aventura por Costa Rica. La maleta que trajo desde el sur del Continente venía cargada de ilusión, trabajo y de mucho béisbol.
El domingo Small tuvo un buen juego vistiendo la camiseta de Zeta Gas y conectó un jonrón que lo llenó de felicidad. Fue como un grito de libertad.
“Cuando llegué aquí no sabía qué hacer, pero me ido topando con gente buena que me ha ayudado y ese jonrón significa mucho, me enfoqué en el picheo y conecté con todo. Estoy muy agradecido con los compañeros que me abrieron las puertas para jugar béisbol”, apuntó Small, quien ya venía con bate y pelota desde el vientre de su madre.
“Desde los 3 años juego béisbol, allá en Venezuela mis padres siempre me apoyaron, a ellos los extraño, pero estoy trabajando duro para traerlos acá conmigo”, aportó el polifuncional pelotero, quien se desempeña como infield y outfield.
Fuera del diamante le apuesta al turismo, “estuve trabajando en el hotel Hilton en Puntarenas, gracias a Dios me han dado la confianza y acá estamos echándole pichón (esforzarse, echarle ganas) para traer a mi familia”.
Sobre Costa Rica Small dice estar muy agradecido porque lo han recibido muy bien.
“Tremendo corazón del tico, un lindo país y disfruto en el campo la práctica del béisbol”, finalizó.
Small jugó como profesional en la filial de los Mets en Venezuela 2013-2014.
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